...y yo nunca entré

Nacida en Julio de 1936, Hunter Tylo fue modelo durante su juventud y tuvo un hijo siendo muy joven. Cambió la pasarela por los focos y su primera incursión en el cine fue en "The initiation (1984) donde compartió protagonismo con Daphne Zuñiga. Era mona pero deseaba la perfección y empezó a hacerse adicta a las intervenciones estéticas poco a poco. Después de un largo tiempo de sequía, su carrera empezó a relanzarse tímidamente participando en varias series como "Los vigilantes de la playa" o "Zorro".
Pues bien nada de esto nos importaría si no hubiera sido escogida para un papel importante en el año 1996 en "Melrose Place", por supuesto. La inexperta actriz, su carrera era más bien pobre por decir algo, se remalía pensando en ese contrato que firmaba para encarnar durante varios años al sexy personaje de Taylor McBride. Pero su experiencia era tan escasa como deslumbrante su belleza, en su apogeo debido a esa afición a pasar por el quirófano. Estaba muy bien construida, ciertamente. En dicho contrato, se estipulaba como claúsula que no se podía quedar embarazada. Hecho que sólo se le permitió a Heather Locklear, a la que se le concedía todo lo que quería (craso error de Spelling... que nunca advirtió que aunque Amanda fue un personaje relevante, había otros con mucha fuerza y con muchísimo respaldo por el público. Un respaldo incluso mayor que el que procesaban al personaje de la publicista).
Pues bien, sólo había pasado un mes cuando Hunter comunicó a los responsables que estaba en estado y fue expulsada automáticamente de la serie. Para suplantarla, se fichó a Lisa Rinna. Y como Hunter debe ser bastante ladina y no pensaba zanjar el tema sin intentar sacar tajada del asunto, aparte del cariz machista que no se debe obviar en todo este asunto, se rodeó de dos abogados prestigiosos como Gloria Alfred y Nathan Goldberg para demandar a Spelling Entertainment Group. El asunto resultó ser un escándalo tal que salpicó la prensa del colorín e incluso tuvo difusión en abundantes medios de comunicación. Finalmente, el juez dictó una sentencia favorable a la demandante otorgándole una indemnización por parte de los productores demandados que ascendía a la nada despreciable cifra de cinco millones de dólares por el daño emocional y pérdida económica que a la "actriz" le supuso el despido.
Su despido fue una pena... con una belleza superior a Lisa Rinna y esos aires ladinos a la hora de conseguir fama, podía haber dotado al personaje de Taylor de alta dosis de seducción y divinismo.
Todo no puede salir bien y una de sus hijas fue intervenida en una operación donde se le extirpó el ojo derecho, afectado por una grave infección de retina.

La carrera de Hunter Tylo continúo brevemente y desde 1998 hasta la actualidad interviene en el bodrio "Belleza y poder" donde ha compartido cartel con Antonio Sabato Junior.
Su afición a las operaciones estéticas se fue convirtiendo en obsesión hasta tal punto que no pudo dejar de retocarse a pesar de estar perfecta, convirtiéndose en la actualidad en una sombra de lo que fue como se puede apreciar en la imagen.

Ha escrito su autobiografía "Making a miracle" y adora los reptiles hasta el punto de ser dueña de una boa constrictor... sin palabras nos quedamos.